sábado, agosto 26, 2006

Trayectorias (I): M. Night Shyamalan

M. Night Shyamalan es un director cuyo genio aún no han aceptado los lameculos de Fellini y Godard. Se ha dicho lo peor de él: que es tramposo, que utiliza siempre los mismos artificios para engañar al espectador (Que yo sepa, lo más cercano que puede haber a un engaño es el final de El sexto sentido, ¡y ni siquiera!), etc, etc. Supongo que no tiene ese aura intelectual que se le pide a los genios, y así le trata la crítica, ni el efectismo barato que caracteriza a los realizadores de Blockbusters, y así le trata el grueso del público.

Las malas famas que ha ido cosechando en su carrera: de fanático religioso (cuando en realidad condena abiertamente las religiones), de conservador (cuando en sus entrevistas ha sido altamente crítico con el conservadurismo americano) le han hecho perder, también, la afinidad de los progres.

Así que el pobre Shyamalan se ha quedado solo, con un pobre puñado de espectadores que desde su primera hasta su última película le hemos sido fieles.

El sexto sentido (1999) fue una película que, en su momento, infravaloré influido por los vituperios de muchos supuestos intelectuales con los que, en ese momento, tenía cierto contacto. Pero lo cierto es que la primera película estrenada en grandes salas del director indio supuso una verdadera vuelta de tuerca en el cine de terror. Lejano de las producciones para consumo adolescente que iban ganando terreno día día, Shyamalan compone una inteligente película donde el miedo no es un fin, sino un medio para hablarnos de la desolación de dos personas que no son capaces de comprenderse a sí mismas ni a su entorno: un niño con el don/castigo de poder ver gente muerta que le comunica su dolor y un atormentado psiquiatra, marcado por el fracaso y por la difícil relación con su mujer. El sentido del terror es sugerente, la cámara sabe inquietar en cada pausada secuencia... . Shyamalan marca aquí las pautas de un cine que utiliza como medio la narración fantástica, pero que está cimentado en sus personajes, trágicos héroes que no encuentran sentido a la ruta que sigue su vida y un talentoso estilo visual. Pocos discuten el que sea uno de los grandes films americanos de los ´90.

El sexto sentido supuso un considerable éxito de crítica (nominada a seis oscars) y público: el más grande que haya obtenido hasta ahora el director. H. J. Osment y la famosa escenita del "en ocasiones veo muertos" es ya mítico . El protegido (2000) comenzó a sembrar malas críticas y decepciones entre los que se esperaban El séptimo sentido. Alejándose de cualquier planteamiento visto hasta ahora en el llamado cine de superhérores, Shyamalan construye una sorprendente mezlca de thriller fantástico y drama, donde los protagonistas son un hombre que descubre su inmunidad absoluta ante cualquier factor externo (Excepto el agua) y un hombre al cual el más mínimo golpe puede fracturar un hueso. En el centro de la trama encontramos una compleja diatriba sobre el bien y el mal y, otra vez, un magnífico drama familiar. Con su infinita potencia visual, vuelve a deslumbrarnos nuevamente, y se consolida, por fin, como un verdadero "auteur", con unos rasgos de forma y contenido cada vez más inconfundibles.

Tardó dos años en ofrecernos su siguiente producto, la hiperpublicitada Señales (2002), un film que separó a sus admiradores entre los que pensaban que es una basura sin ningún tipo de lógica, los que pensaban que era una oda a la cerrazón estadounidense (descartado públicamente por Shyamalan) y los que la calificaron de "otra obra maestra más". En mi opinión, Señales es una película inteligente e inquietante, magníficamente narrada y estructurada, con ese especial interés por los personajes que caracteriza el cine de Shyamalan un pelín simplificado. Sabe dar miedo, está rodada en estado de gracia, pero carece tanto de lógica que a ratos pierde credibilidad. Además, su complaciente, aparentemente teocrática y rotunda escena final (impuesta por la productora) le resta muchos enteros.

Otros dos años habían de pasar para que nos llegara El bosque (2004), publicitada como un film de "miedo" al uso, pero que realmente era una lírica fábula sobre la inocencia y el poder del amor y del pánico como método político de control, aunque, eso sí, el terror (tanto en la forma como en el contenido) no dejaba de tener relevancia. El bosque da miedo, inquieta, pero también fascina por su trabajada estética, por su lírico uso de los simbolismos y de la alegoría. Otra vez, los personajes vuelven a ser el centro de un relato en esta pieza magistral de cine. Shyamalan, película a película gana en complejidad de matices, en solidez y fluidez narrativa.

Su última película (y su último fracaso en taquilla hasta hoy), y la que ha motivado esta breve crónica sobre su trayectoria es, a mi parecer, la mejor de las que ha hecho hasta ahora. Aún más: lo mejor que nos ha dado el cine fantástico desde hace muchos años. Más todavía: Una obra maestra.

La joven del agua (2006) nos introduce, desde el primer segundo, en la lógica de cuento de hadas infantil. Nos habla de un mundo primigenio en que los seres mágicos del agua y los hombres estaban unidos. Pero el hombre, en su afán por poseer (otra vez la profunda espiritualidad del director), se fue alejando y construyendo un mundo donde la destrucción marca el ritmo cotidiano.

Esta nueva película tiene sabor a antología: todas las preocupaciones, éticas y estéticas del director, se dan lugar y conforman una obra de gran madurez, escrita con infinita inteligencia y rodada con mano maestra. De pronto, Shyamalan mezcla los géneros cinematográficos básicos, sin dejar que se contaminen entre sí, como si se llevara dedicando a esto cincuenta años: un curioso y casi omnipresente sentido del humor (que nos lleva de la sonrisa a la carcajada), una capacidad de emocionar, sin forzar las situaciones y con sinceridad, un talento para el terror y el suspense fuera de lo común, a veces sugiriendo y otras siendo explícito. La joven del agua es la película más personal que haya hecho el cineasta hasta ahora, la más honesta, la más libre. No hay un plano o un movimiento de la cámara donde no apreciemos su sugerente sentido visual y su impresionante imaginación; no hay un diálogo que no transmita emoción o inteligencia.

Al principio, tenía miedo de ser decepcionado. Toda la trama fantástica, con aquel Mundo Azul perfectamente explicado con todo tipo de nombres ("narfs" y demás) me daba la sensación de que llevaría a la película a ser demasiado explícita. Pero no, en ningún momento perdí la fascinación por lo que me decía este verdadero maestro del arte de contar historias. Y me gustó mucho todo: sus personajes (Desde el protagonista hasta el más insignificante secundario), su humor, sus giros en la trama sin trampa ni engaño alguno, la inquietud que es capaz de crear, los diálogos, los actores (Giammatti y B.D. Howard, deslumbran)... formando así un conjunto absolutamente redondo, sin cabos sueltos ni carencias de ningún tipo.

La película es un cuento, cargado de la poesía de la que ha impregnado sus últimas obras, pero sus personajes han salido de la vida real, del mundo cotidiano. Pueden estar exagerados en algunos casos, pero su solidez me resulta indiscutible. Todos ellos le sirven para crear una especie de compendio de las distintas culturas y razas de un mundo creciente en mestizaje. Algunos hilarantes (el tío que se pasa el día ejercitando su brazo), otros paródicos (el crítico, protagonista de una de las escenas de metacine más divertidas que haya visto en mucho tiempo), otros de aire trágico (el ensayista que interpreta el propio director, ¿quizás aludiéndose a sí mismo?)... . La problemática colectiva e individual sigue siendo el tema central del cine de Shyamalan, y sus respuestas aluden a una reforma espiritual, a sus ojos, la única solución posible en la zozobra del mundo contemporáneo. La "narf" que interpreta Bryce D. Howard será la que una a todos los personajes (de nuevo la alegoría social) y les haga encontrar su papel en un mundo donde, a nivel individual y social, vagamos a la deriva.

Mención aparte merecen los dos sustos a base de aspersores: a eso le llamo yo saber jugar con el espectador, codearse con él, hacerle botar en el asiento para que, acto seguido, se eche a reír.

La joven del agua es la recuperación del placer por el placer, pero también una verdadera transgresión en el cine fantástico. Shyamalan no sólo inmiscuye toda su persona en la película, sino que, en medio de su (matizada) sencillez, nos encontramos inteligentes reflexiones sobre el arte, el mundo post 11-S y sobre el hombre en sí mismo. Es una película que sabe dar miedo, emocionar y hacer reír a la vez. Y eso es casi más de lo que pido hoy en día a un producto salido de la Factoría.


11 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno, yo también voy a hacer lo mismo que tu, pero de una manera un tanto más simple. No porque se lo merezca menos o más, sino porque hay pelis suyas que apenas recuerdo.

Shyamalan, a nivel personal, me ofreció una sensación extraña. No porque diera más o menos miedo, por sus trailers " engañosos " o todas las chorradas que se os ocurran. Sus desniveles . Eso era lo preocupante, una filmografía como la de Carpenter, Terry Gilliam ... muy desigual, y de la cual practicamente muy pocos devotos pueden apreciar completamente su cine.

El sexto sentido : Mi primer acercamiento, y para mi un cachondeo. Ciertamente, tiene su nivel de interés, y se le puede sacar temas cuales sean. Pero ni tan siquiera el final logra impactar, al menos cuando se descubre la fuente a la cual plagia : La muy superior " muertos y enterrados " de Dan ,O Banoon, diseñador de Aliens y guionista de "Alien: el octavo pasajero ", "La divertida noche de los muertos vivientes"... entre otra joyas del cine fantástico. Bruce Willis hace de nuevo de Bruce Willis, y el niñato me revienta casi tanto como el gordo de SJK. Aún paladares aparte, tiene sus sustos, y tal, aunque a mi me aburre soberanamente.

El protegido : Hice una crítica en su tiempo, y me limitaré a copypastearle gustosamente:

"su mejor película, pero a Warps de distancia. Nada que ver con el bodrio de Señales ( bodrio, aunque con ciertas maniobras de interés ), la odiosa " El sexto sentido ", y la irregular, aunque vista su filmografía, convincente, " El bosque "

La película no me pareció en absoluto tediosa, aunque comprendo que lo parezca para cualquiera que vaya al cine como al que va a comprar cabiar de chorreras, pero lo que si no puedo permitir es que se diga que está mal hecha.

Una puesta en escena llenísima de matices, contado hasta 4 planos secuencia hoy en día impensables, con otros rasgos experimentales tan potentes como el plano del televisor, y un efecto " sincopado " en cada una de las " apariciones ", y flashbacks de Bruce Willis, que de nuevo hace de Bruce Willis, y ya comentaré más tarde. Los travellings por momentos son excesivamente dilatados, apenas hay presencia del zoom-in, y los picados y contrapicados juegan bastante en las escenas más " dinámicas ".

La fotografía es, como en el " Sexto sentido " impecable, sin apenas grano y con tendencia a los colores apagados y oscuros, y que gracias a una partitura con bastante potencia logra crear un halo de turbación que me mola mucho. Sobre todo en dos escenas, la de Samuel L jackson, hablando con Willis por teléfono mientras la camara zarandea por la tienda, que ha quedado destrozada por unos vándalos, y la de Willis tocando a cada personaje con ambos brazos en forma guarda de tráfico en medio de la plaza principal.

Las actuaciones, van de ful, a estambul. Por un lado tenemos a Willis haciendo de Willis, un tio frío, que casi parece competir con bill Murray en el puesto por el pedrusco del año, pero en este caso lo veo muy acertado. Por un lado la relación matrimonial, incapaz de mantener un diálogo normal, y que ha perdido la pasión y el " romance " de antes, por un personaje obsesivo, carente de sentimientos, que padece insomnio, y que necesita ocupar su tiempo en un trabajo cualquiera, para seguir soportando su existencia. Samuel L Jackson es la antítesis ,un hombre constreñido por su físico, que ha intentado dar un sentido a su vida y que busca un objetivo, que lucha por sobrevivir. Además de uno ser blanco y el otro negro, evidentemente.

Por lo demás, y para no redundar sobre de lo que habla, más que tratar la dualidad del ser humano de Jung, como algunos han dicho en su momento, creo que intenta dar prisma a dos arquetipos de hombre confinados a una situación extrema, el primero mental, y el segundo física, amén de todo lo que he dicho antes, y como ambos tratan de sobreponerse a este mundo, pese al futil empeño wn muchos momentos. También es una peli de superheroes en su esencia, el "malo" necesita al "bueno" para conceder una dignidad a su existencia, necesita conocer su extremo para tener valor para continuar con vida.

Quizá el final me parezca, a pesar de muy efectista ( lo cual se agradece en este caso ), un poco tramposo. Porque evidentemente no creo que vaya poniendo bombas el tio a cada tren que pase, hasta encontrar así al modelo ese. Pero bueno, eso también le pasa a Saw, y todo el mundo le sonríe, así que bien."

Señales : Película que para mi se infunda en la necesidad de creer. De tener Fe, en un sentido, por mucho de que alguien diga eso de "condenar a las religiones" y tal, metafísico y plenamente espiritual, algo que para mi no es ofensivo, en absoluto ( aún recuerdo pelis como " Teniente Corrupto ", que debe de ser la peli más apologético-cristiana que jamás haya visto ).

Se nota bastante cinefilia, sobre todo en escenas casi calcadas de " pájaros " de Hitchcock, o la más destacable, la del sotano en referencia a " la noche de los muertos vivientes " ( y siendo muy amable, claro ).
Por lo demás, los estraterrestres son una excusa, y como tal no se trata de un homenaje al cine de bichos de los 50 ni nada parecido ( y me sorprende que haya gente que diga esto, cuando supongo jamás habrán visto una peli así ). Por lo demás, se nota la mella de hitchcock, la impronta de Spielberg y sus crios, y lo " formulaico " de su final, que cae por méritos propios en un ridículo atroz.
Para mi, un bajón considerable, y su única mala película, sin llegar a ser un profundo bodrio. no obstante, ya la revisaré para destriparla considerablemente.

El bosque : Es quizá su peli con más contenido. No da miedo, ni lo necesita ( peor por el amor de Dios, alguien no se dió cuenta hasta ahora de que no es un director de género ?! ).
Sobre el film, tiene un mensaje que sí se puede considerar terrorífico, pero no en su forma cinematográfica, o en el caso de intentarlo estaríamos demasiado " distantes ", sino que en su mensaje, como medio para autoperpetrarse, como sucede en varios clásicos del fantástico, y la famosa obra maestra " La ilsa del Dr Moreau ".Aún así la peli es mas un drama costumbrista, y aunque su sorpresa final no sea tan frontal en el sentido de " sorprender ", si que sugiere mucho más, y es lo que la hace cobrar sentido. Ya no se trata del impacto chocarrero de Señales o el plagio del " sexto sentido ", es la nota intrínseca que envuelve la trama o su sentido global.
Por lo demás, no me queda mucho que decir, quizá hubiera quitado todas las escenitas de terror, y tal. Es como si ese eclecticismo de meter dos escenas de terror, fantasía y tal tuviera que estar omnipresente, porque sí.Pero bueno, una pequeña falla para en mi parecer su segunda mejor película.
Acerca de La joven del agua, ni idea. Pero la veré estos días, espero.

PREMUTOS ( Norboskoso oscilante )

Fiodor M. Dostoievski dijo...

A mí lo que me gusta de El sexto sentido son sus trágicos personajes y su uso nada gratuito ni efectista del miedo. Es una película perturbadora, pero también profundamente humana.
¿Un plagio? La verdad, ni lo sé ni me importa. A mí me sigue gustando (Como sigo impresionándome con la secuencia final de Aguirre, la cólera de Dios, aún estando prácticamente copiada de la primera peli de Ruy Guerra).
Sobre el final "tramposo"...hay muchas maneras de verlo. ¿Por qué el personaje tenía que darse cuenta de que estaba muerto? ¿Acaso la lógica que rige el mundo de los vivos ha de ser la misma que el de los muertos?.
Veo que no vemos igual a Shyamalan. Yo, excepto por la fallida Señales, creo que ha hecho cuatro películas redondas.
Muchas gracias por opinar, Premutos. Hacía tiempo que nadie escribía tanto en el blog.
Un abrazo, cuídate.

Anónimo dijo...

Hombre, por lo que he leido no vamos tan desencaminados.

Quitando señales, que para mi tiene una secuencia-plagio bastante gordota ( áunque mejor rodada, quizá ), toda la que transcurre en el sotano. Pero eso no es obice para que no la valore.

Lo del final del sexto sentido no digo de que sea tramposo, en absoluto. Aunque no me parece para nada una película innovadora, lo siento. Ya no solo es que en su mismo año se estrenó antes " El último escalón", sino que además lo que en cierta manera me molesta ( y digo en cierta manera, porque solo se trata de una película )de que haya tanto bamboleo por un final copiado.Solo opino eso, independientemente de que el cierre quede muy bien, o muy mal.

Y respecto a el Bosque sí opinamos igual, si eso quitando las " escenas de terror", y en la del protegido creo que también. En rasgos generales, obviamente.

Saludos, y a ver si escribes más (6) :D

PREMUTOS ( NORBOSKOSO OSCILANTE )

Anónimo dijo...

Y tal, y tal

Anónimo dijo...

Eeeeeeeps...no.

Anónimo dijo...

La verdad es que la joven del agua es una maravilla. Viéndola en pantalla grande te infiltras de tal manera en la historia de la película que se te olvida todo lo demás. Es muy original la manera en la que introduce en el film la literatura y el propio cine de forma que quedan ligados. Dovtoievsky no es el único que la considera una obra maestra trascendente en la historia del cine.

Anónimo dijo...

Pues ya siento no opinar como tu, Ignacio, pero acabo de verla y la verdad es que me ha decepecioando mucho. Me ha parecido una tontería, muy bien rodada,eso sí, con unos planos bastante originales, con el "toque Shyamalan", y unos movimientos de cámara lentos y tranquilos, que se agradecen hoy día, pero en el fondo una chorrada. No sé, igual no he conseguido zambullirme (nunca mejor dicho)en el estilo del film, pero el guión me ha parecido una colección de los peores clichés hollywoodienses. Es tópica, infantiloide, aburrida, se toma demasiado en serio a sí misma, etc...

Sobre el resto de la filmografía de Shyamalan decir que he visto las otras cuatro, pero que debería revisarlas urgentemente, sobre todo El Protegido, que no ví en muy buenas condiciones, y que estoy seguro que si la vuelvo a ver me gustaría mucho más.
El Sexto Sentido me gustó pero le ví bastantes fallos, aunque creo que también debería revisarla, Señales la he visto dos veces y las dos me ha parecido muuuuy mala (aunque con un par de escenas de suspense realmente conseguidas) y El Bosque es su peli que más me gustó: lírica, hermosa, inquietante e inteligente. Muy buena. Una película que realmente te hace reflexionar.

Por cierto, haber si te pasas por mi blog y haces el juego de citas cinematográficas que he hecho, haber cuantas adivinas...
Venga, un saludo.

Horrorscope dijo...

Aparte de "La Joven del Agua", que espero ver en uno de estos días (de hecho debería haberla visto ya, pero los resfriados veraniegos se han sobrepasado con uno), la única película que no he visto de este efectivo (que no efectista, aunque a veces, las menos, el cineasta en cuestión caiga en este error) realizador es, sorprendentemente, la del "crío que ve muertos" (cosa que no quita que casi me la sepa de cabo a rabo, como me pasó con "Los Otros").
Personalmente mi opinión acerca de Shyamalan es muy similar a la expuesta por usted, Dosto, y algunos de los usuarios que han comentado anteriormente. Las dos películas que más me entusiasman (al menos de las que he visto) del peculiar director son "El Protegido" (una nueva, genial y contundente visión a cerca de los superpoderes (como es obvio), en la que se hace incapié de la forma más coherente en los extremos del ser humano) y "El Bosque" (de la cual sí creo, a diferencia de Premutos, que las escenas de terror eran necesarias; al menos a mí me introdujeron de manera satisfactoria en el ambiente malsano del fin sorprendiéndome con su desmitificación de los monstruos como quimeras inhumanas).
Por otra parte, pese a que a mí también me desagrada ese mensaje y esa falta de sentido que se da en "Señales" (por no hablar del cierre con el Padre Mel poniéndose la "sotanita"; me alegra enterarme, gracias a usted, de que se dio por imposición de los productores), el filme está constituido por otros factores que sí me agradan y que la salvan. Coincido con Premutos a cerca de las referencias cinéfilas que se dan en la película, de hecho tanto lo de "Los Pájaros" como la escena en el sótano de la gran obra de Romero "La Noche de los Muertos Vivientes", me parecen claros homenajes por parte del hindú (porque lo es ¿no? ¿o me equivoco?). La peli me parece entretenida, aunque compredo que a muchos les pueda originar sopor; y como ejercicio cinematográfico no me parece nada desdeñable. En fin, reconociendo sus fallos (que no son pocos, al menos los que son son muy grandes) es una película que me gusta.

Definitivamente Shyamalan me parece un autor muy interesante, y sin duda de lo mejor que nos llega de la Babilonia contemporánea. Me sorprende ver como trabaja con las "majors" a partir de argumentos que bien podrían estar destinados a una producción de "serie b", y que sin embargo (a diferencia de su compañero de generación Stephen Sommers, que prácticamente trata de utilizar la misma técnica fracasando, al menos artísticamente, totalmente) consiga entregarnos un producto digno de ver y no un pestiño hijo de la Mtv como sucede con el otro cineasta que he citado, con el fin de aumentar los bolsillos (enormes) de los ejecutivos de Hollywood.

Bueno dejo de daros la chapa, que ya se que soy un coñazo de ser, y ya le diré (en caso de que consiga verla) que me pareció "la chavalita de las aguas".

Cuídense.

Horrorscope dijo...

Ya la ví, y sinceramente me ha parecido un verdadero prodigio. La considero la mejor obra de Shyamalan, pese a no tenerla en tan alta estima como usted.

Me quito el sombrero ante este hombre, que ha sabido como pocos, crecer como cineasta.

John Trent dijo...

¿Que decir de este hombre?.

En mi blog, ya lo he comentado mil veces. Este tipo es un genio y uno de los mejores directores del panorama cinematografico actual.

Una lastima que tanta gente le menosprecie e incluso le odie, porque es de los pocos originales que hay a fecha de hoy en una gran pantalla de cine.

Su mejor pelicula es, en mi opinion, El protegido. Una autentica obra maestra incomprendida.

Anónimo dijo...

Vaya, me alegra ver que al menos somos unos pocos los que valoramos a Shyamalan.